Brendan Allen y su estrategia ganadora
Brendan Allen tenía claro desde el principio que podía desgastar a Reinier de Ridder si la pelea se prolongaba. Y vaya si tenía razón. El sábado por la noche en el Rogers Arena de Vancouver, Allen demostró que su confianza estaba bien fundamentada cuando logró una victoria por nocaut técnico en el cuarto round, después de que la esquina de de Ridder tirara la toalla.
Una lectura precisa del rival
Lo interesante es que Allen ya había visto esta película antes. En la conferencia de prensa posterior al combate, comentó: «Puedes verlo cuando peleó contra el ruso [Anatoly Malykhin] por segunda vez en ONE, hizo lo mismo. Creo que en el tercer o cuarto round, pasó exactamente lo mismo. Sabía que podía lograrlo. 25 minutos es un tiempo muy, muy largo para recibir castigo».
La verdad es que Allen no se equivocó en su análisis. Aunque admitió que de Ridder «aguantó un round más de lo que pensé», también reconoció que él mismo «no empezó demasiado fuerte en el primero». Al final, fueron tres rounds de dominio absoluto los que sellaron el destino del combate.
El desgaste progresivo que marcó la diferencia
De Ridder, que venía de impresionar con cuatro victorias consecutivas en el UFC -incluyendo una contra el ex campeón Robert Whittaker-, empezó fuerte. Pero como bien anticipó Allen, no pudo mantener ese ritmo. Aunque logró llevar a Allen al suelo en los rounds 2 y 3, Brendan supo revertir las posiciones y responder con un control superior y un ground-and-pound efectivo.
Allen recordó el momento clave: «Supe que era el segundo [round] cuando me quedé arriba y solo le estaba golpeando y golpeando… No quería agotarme intentando sacarlo de ahí. Si hubiera tenido como seis semanas [de preparación], seguro que le hubiera dado más. Solo intentaba ser inteligente».
La mentalidad de un luchador en crecimiento
Lo que más llama la atención es la madurez mental que muestra Allen. Después de dos derrotas consecutivas contra Nassourdine Imavov y Anthony Hernandez -que él considera podrían haber sido victorias-, ha logrado recomponerse con triunfos sobre Marvin Vettori y ahora de Ridder.
«Si miras los números y realmente ves la pelea en detalle, conociendo las Reglas Unificadas, puedes argumentar que gané ambas peleas», reflexiona Allen. «Pero es lo que es. Es una derrota en mi récord. Aprendí de ello».
Con solo 18 peleas en seis años y siendo el más joven en el Top 5 de la división, Allen tiene claro su objetivo: «Estoy en el punto de mi vida en el que solo vengo aquí, hago el trabajo, doy lo mejor de mí y la mejor actuación que puedo para los fans, para todos aquí, para la promoción. Estoy intentando crecer y ser el mejor que puedo ser».
La división de peso medio está más competitiva que nunca, pero Brendan Allen ha dejado claro que viene por ese cinturón.



